Qué comer en Viena: platos típicos
Una visita a la capital de Austria no puede estar completa sin disfrutar de su gastronomía. Son bastantes los platos que comer en Viena, tanto salados como dulces, por lo que tendrás de donde elegir.
En este artículo, tienes una recopilación de los platos más tradicionales y que no puedes dejar de probar en tu viaje a la ciudad imperial. ¡Echa un vistazo y apunta los que más te apetezca probar!
Platos típicos que comer en Viena
A continuación, tienes un recopilatorio de los platos más tradicionales que comer en Viena. Entre ellos, hay algunos entrantes, sopas, platos principales y postres. Al final, también encontrarás recomendaciones de algunas bebidas típicas.
Entrantes y sopas 🍜
Para empezar, vamos a ver algunos platos o sopas que se pueden comer como entrantes (y como acompañante, en algún caso).
Rindsuppe
La sopa rindsuppe es una de las más populares del país. Esta variedad en particular ha desempeñado un papel vital en la historia culinaria vienesa, con la que suele asociarse. Aunque es sencilla, la preparación del caldo lleva mucho tiempo y, a menudo, incluye hervir solo huesos de ternera durante largo tiempo.
La carne se cuece por separado, normalmente en trozos grandes. Posteriormente, se corta en rodajas o dados. Las verduras más comunes que se cocinan con la carne son las zanahorias, el apio y los puerros, que se sirven junto con la carne. Además de sal, se le añade perejil.
Erdäpfelsalat
Esta ensalada de patatas es muy común en todo el país y la verás en todos los restaurantes vieneses. No se suele comer como entrante en sí, sino como acompañante a otros platos, normalmente, de carne (schnitzel, salchichas…) o verduras.
Se trata de patata hervida y cortada en rodajas a la que se le añade una especie de salsa que lleva vinagre de vino blanco, un poco de mostaza, cebollas rojas, cebollino y una pizca de sal y pimienta. Algunas recetas también incluyen un poco de caldo de pollo o de carne.
Platos principales 🍗
A continuación, pasamos a los platos principales que comer en Viena, donde tienes una variedad, aunque se suelen centrar en la carne.
Wiener Schnitzel
El wiener schnitzel es uno de los platos más conocidos de la cocina austriaca en general. Sin embargo, como su nombre indica, es originario de la capital y uno de los platos que comer en Viena imprescindibles.
Es un filete de ternera fina, empanada y frita que tradicionalmente se sirve con una cucharada de mermelada de arándanos rojos, gajos de limón y patatas (patatas fritas, hervidas o una erdäpfelsalat). Que no te sorprenda si una ración se sale del plato, ya que suelen ser enormes.
Como curiosidad, aunque se puede hacer con otro tipo de carne, como la de cerdo, el plato original está protegido por la ley austriaca y, para poder llamarlo Wiener schnitzel, debe estar hecho con carne de ternera (que es más cara).
Backhendl
Del wiener schnitzel pasamos al backhendl, que se podría definir como la versión de pollo del schnitzel. Esta versión vienesa de pollo frito apareció inicialmente en el siglo XVIII y fue especialmente apreciada durante el periodo Biedermeier.
El plato consiste en partes del pollo que se frotan generosamente con especias y zumo de limón. Luego, se pasan por huevo, harina y pan rallado. Finalmente, se fríen hasta que estén dorados y crujientes. Se suele servir con los mismos acompañantes que el wiener schnitzel.
Goulash
Otro de los platos que no puedes dejar de comer en Viena es el goulash. Esta importación húngara se ha hecho enormemente popular en Viena y en toda Austria, pero se ha adaptado localmente para convertirse en su propio plato distintivo.
Se trata de un sustancioso estofado de ternera condimentado con tomates, cebolla y pimentón. La versión que probablemente degustarás en Viena suele incluir semmelknödel (albóndigas). Es un plato ideal para un día frío de invierno.
Wiener Wurstel
También se las conoce como wiener würstchen y son las salchichas típicas de Viena y de muchas partes de Austria (diferentes de las frankfurter würstchen). Son sencillas pero famosas por su sabor. Además, es un plato típico de los puestos de comida callejera y suele ser más económico.
Tradicionalmente, se elaboran con carne de ternera y de cerdo y se mezcla con especias como pimienta blanca, cilantro, pimentón, sal y jengibre. Se suelen servir con mostaza picante, junto con ensalada de patatas, rábanos, espárragos de primavera y otras verduras frescas.
Spargel
Los espárragos son una delicia local que se consume mucho en primavera, desde finales de abril o principios de mayo. Viena ofrece algunos de los espárragos verdes y blancos más deliciosos del mundo, siempre preparados de forma creativa y fresca.
Los puedes encontrar rebozado en pan rallado (estilo schnitzel) y servidos solo con un poco de mantequilla y limón. Pero también los puedes comer en sopas, envueltos en jamón serrano y untados con salsa holandesa.
Beuschel
Para acabar con los platos principales que comer en Viena, tenemos el beuschel, uno de los clásicos. Debido a la consistencia de los ingredientes, el beuschel requiere mucho tiempo y es más común encontrarlo en restaurantes austriacos tradicionales y notables.
Este plato contundente se elabora con restos de ternera u otros animales, normalmente corazón y pulmones. Se sirve en una deliciosa salsa marrón oscura.
Postres 🍰
En este apartado, vas a encontrar una recopilación de los postres que comer en Viena más deliciosos.
Sachertorte
Llegamos a la parte dulce con la mítica sacher torte, quizás la tarta de chocolate más popular de Viena y de Austria. Los orígenes de la tarta se remontan a 1832, cuando la inventó Franz Sacher, pastelero del canciller de Austria.
Se trata del clásico bizcocho de chocolate en capas, con mermelada de albaricoque de alta calidad entre capas y glaseado de chocolate por encima. Se suele servir con un poco de nata montada. Es el dulce estrella de las emblemáticas cafeterías de la capital austríaca.
Apfelstrudel
El apfelstrudel es otro manjar austriaco conocido en todo el mundo. Ganó popularidad en Europa del Este bajo la influencia del imperio de los Habsburgo. Se cree que llegó primero a Hungría y luego a Austria. Lo encontrarás en pastelerías, panaderías, cafeterías y restaurantes de Viena.
Este dulce consiste en finas capas de masa ligera y crujiente, estirada y rellena de una sabrosa manzana, azúcar, pasas, limón y canela. Normalmente, se adorna con frutos secos y se espolvorea con azúcar en polvo. También se puede encontrar relleno de otras frutas, como bayas y albaricoques.
Kaiserschmarrn
Cuenta la leyenda que el kaiserschmarrn, uno de los dulces que comer en Viena más deliciosos, era el postre favorito del káiser Francisco José I y que de ahí recibe su nombre.
Este postre vienés puede describirse como una tortita esponjosa, ligeramente caramelizada y revuelta. Tradicionalmente, se sirve con compota de ciruelas, de manzana, de pera o de bayas. Se remata espolvoreándolo con azúcar glas.
Para hacerlo todavía más atractivo y para todos los gustos, hay algunas variantes modernas de este clásico: con manzanas (apfelschmarrn), con cerezas (kirschschmarrn), con ciruelas mirabel (mirabellenschmarrn), con nueces, almendras y avellanas (nußschmarrn) y con crema agria (sauerrahmschmarrn).
Vanillekipferl
Para acabar con los dulces, tenemos las vanillekipferl, que además de ser típicas de Austria, también lo son de zonas de Hungría y de Alemania. Se dice que se originaron en el Imperio Austrohúngaro, allá por 1683. Actualmente, son especialmente populares en Navidad.
Son una especie de galletas dulces con forma de media luna. Se hacen con harina, azúcar, mantequilla y vainilla. En algunos casos, también contienen frutos secos molidos, como avellanas, almendras o nueces.
Bebidas 🍺
Para finalizar, no podían faltar en este listado algunas de las bebidas más tradicionales y comunes que puedes beber en esta ciudad.
Vienna Lager
La cerveza lager vienesa se originó en 1841, cuando Anton Dreher experimentó con la nueva tradición británica de secar la malta sin usar malta pálida de cocción directa. Dreher combinó esta práctica con levaduras lager para crear una cerveza de color rojizo-cobre que lanzó al mercado con el nombre de Vienna Lager.
Esta cerveza es cremosa y suave, con aromas a malta tostada y pan tostado. Suele ser de cuerpo medio a ligero, mientras que el final es seco y suele tener un sutil amargor a lúpulo.
Wiener Melange
El wiener melange es el café más conocido de Viena. Aunque, a veces, se compara con el capuchino, el melange vienés es una mezcla especial de café y leche que se asemeja más al café con leche.
La historia de este café se remonta a mediados del siglo XIX, cuando se tienen los primeros registros escritos sobre él. Hay varias versiones de este clásico, pero la más común es con un solo espresso de café suave que se sirve en una taza grande con leche y espuma.
Einspänne
Viena tiene una cultura del café muy extendida y no acaba en el wiener melange. El einspänner es un clásico del café vienés que combina espresso y grandes cantidades de nata montada por encima. Suele servirse en un vaso alto y puede espolvorearse con azúcar glas o cacao en polvo.
La bebida debe su nombre a un carruaje tirado por un caballo. Esto es así porque, supuestamente, este tipo de café era ideal para los cocheros porque la nata mantenía el café caliente y evitaba que se derramara durante los trayectos.
Si quieres conocer otros platos típicos que se comen por toda Austria, puedes echar un vistazo al siguiente artículo con un montón de recomendaciones deliciosas.
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